Mensaje 9

21.08 hs. La vidente: " Está la virgencita, la virgencita dice: nuevamente estoy entre uds. trayendo mi Mensaje de Amor y de Paz. Quiero decirles en esta noche cuán ofendido está mi Corazón, los hombres de la Iglesia, los sacerdotes, los obispos ofenden mi Corazón de Madre.

Día tras día surgen opiniones nuevas sobre los Evangelios, sobre María la Madre de Jesús, María la del sí, sin demoras, sin pensar, María no pensó, en su corazón sintió que debía decir sí, sin preguntar, sin decir-espera que lo voy a pensar-. Es el sí que todos los católicos deberían decir al Padre, el si firme del que tiene verdadera Fe.

Mi Corazón ofendido porque los obispos no hacen lo que tendrían que hacer, y volveré sobre el tema cuantas veces sea necesario.

Un día cuando ellos conozcan estos mensajes dirán-esto no puede ser-, pero saben en sus corazones en sus conciencias, que es verdad.Jesús dijo-del árbol bueno se cosecha buena fruta, del árbol malo, la fruta se tira a los cerdos-, en los seminarios del mundo, sí, en los seminarios del mundo, no hay vocaciones, no hay jóvenes que quieran seguir a Jesús de cerca.¿Y porqué no los hay?, porque los Pastores no guían el rebaño como debieran, y los sacerdotes, dicho está, los sacerdotes también se han dejado ganar por las cosas mundanas. 

Si los Obispos sucesores de los apóstoles hicieran lo que deben hacer como obispos sucesores de los apóstoles, los seminarios estarían llenos. Seminario, semillero, eso tendrían que ser. Más si recorréis los seminarios del mundo, veréis que no hay vocaciones, porque tendrían que estar repletos de jóvenes, alegres, con vocación de servir a Dios en el sacerdocio, y esto no sucede, y mi Corazón sangra, como sangra el Corazón de Jesús, que un día se hizo hombre y les trajo a los hombres la Buena Nueva, la Renovación, en poco tiempo llegará otra renovación.

El que peca que se arrepienta, los obispos los sacerdotes,¡ que se arrepientan, que lloren copiosas lágrimas, que pidan de rodillas perdón a Jesús! porque no han cumplido porque han pecado. Que pidan perdón a la Santísima Trinidad, Dios Padre, Dios Hijo, Dios Espíritu Santo. El tiempo de renovación ha llegado, mi ángel les mostrará mañana una parte de lo que está dicho se debe mostrar para que uds. sepan, como pecan los hombres en el mundo.

Y el Santo Padre es un mártir, María la Virgen la Madre de Jesús, la que un día en las bodas de Canaá le pidió que hiciera su primer milagro, os dice en esta noche: María reunida en el cenáculo, esperando la llegada del Espíritu Consolador, el que abriría la lengua de los apóstoles, hombres trabajadores, rudos...María no pidió para ella ¡nada!, porque sabía cual era su papel.

El Santo Padre ha tenido que dar a conocer por escrito sellado con su anillo para que la Iglesia Católica Apostólica Romana, comprenda de una vez y para siempre que la mujer en la Iglesia Católica ¡jamás será sacerdotisa!.

María pudo pedir para ella este honor, poder consagrar el pan, tornarlo de pan a Cuerpo de Jesús y el vino en su Sangre, pero María, humilde, sabía que esto no era posible, porque de ser así no tendría que haberlo pensado siquiera, Jesús se lo hubiera dicho.

Y, ¡cuántos sacerdotes desviados, que se han casado y siguen consagrando, esto es un pecado gravísimo!, tienen su manos manchadas  y siguen consagrando. Es un movimiento muy grande que hay dentro de la Iglesia, los sacerdotes que quieran dejar de ser célibes, que desean casarse ¡que se vayan, que abandonen el sacerdocio, que no ultrajen más a Jesús, que no ofendan más mi Pureza!.

Vosotros está dicho, seréis heraldos de Cristo, y en este ser heraldos, ésta es también vuestra misión, ¡que sea anatema, los que deseen ser sacerdotes casados!. (La virgencita junta sus manos, en su rostro hay mucho dolor, dice), sí en mi rostro ves dolor, pero no puedes ver el dolor que hay en mi Corazón.

Este es mi Mensaje de hoy, a vosotros a quienes me digno hablar, es la petición, defended el celibato del sacerdote católico, apostólico, romano. Rezad mucho el Rosario, rezad mucho por el Santo Padre y pedid que los pecadores se conviertan, porque lo que está dicho, dicho está.

Os lo dejo hasta la próxima visita con la bendición de la Ssma. Trinidad, Dios Padre, Dios Hijo, Dios Espíritu Santo, hasta pronto.-"