lunes, 21 de febrero de 2011

Mensaje 25



5/8/94 20.57 La vidente: está la virgencita, la virgen dice: " Soy la Inmaculada Concepción María Rosa Mística y estoy nuevamente entre uds. trayéndoles Mi Mensaje de Amor y de Paz.
María la humilde, María la Madre de Jesús está aquí para pedirles en nombre de Mi Amado Hijo, que déis un día, cuando ya os diga, a conocer estos Mensajes  que he traído a uds.,  para todos  los hombres, pero especialmente para los hombres de la Iglesia, para los sacerdotes mis queridos hijos y para los obispos, para que ellos conozcan lo que siente en su Corazón María la Madre de Jesús, y para que conozcan lo que siente Jesús, ¡ tan ofendido, tan agraviado!.
Los hombres de la Iglesia bien conocen, bien saben, cuánto se blasfema, cuántas injurias a Jesús, a Mi Divino Jesús, por lo tanto, las injurias hechas a Jesús, también a mi. Mi corazón de Madre sangra de dolor, por las blasfemias y las injurias, que los hombres de la iglesia sepan que un día tendrán que rendir cuenta por todos los que se perdieron, ¡cuantos y cuantos en el mundo se han perdido por las enseñanzas espúreas, por no enseñar el Evangelio, por no repetir las Palabras de Jesús!, es tan fácil, es tan simple, más todo esto se ha convertido en estudios y más estudios, la sicología que ha envenenado las mentes los corazones.
María en esta noche, quiere decirles que los obispos y sacerdotes conocerán lo que María ha venido diciéndoles durante este tiempo en el cual se dignó a bajar para hablarles a los hombres, para hablarles a ellos, que se arrepientan porque la Renovación está en marcha ,que se arrepientan de corazón, de rodillas frente Jesús Sacramentado, pidan perdón y lloren copiosas lágrimas y salgan a juntar de nuevo al rebaño, ¡conviértanse, conviértanse! porque si no lo hacen aún cuando la Misericordia de Dios es infinita, aún cuando Mi Hijo Jesús ha dicho que tiene un mar de misericordia, ¡ que El es la misericordia misma!, deberán rendir cuentas por todo lo que no han hecho, y  es mucho, han perdido muchas almas que nunca jamás volverán a recuperar, entonces es hora de conversión, de arrepentimiento, cada uno sabe en su corazón lo que ha hecho y lo que hace, ¡ que no es lo que pide Jesús!.
Jesús pudo ser un gran rey, y nació pobre como el más pobre en un portal, vivió humildemente, trabajó toda su vida, hasta que llegó el turno,  la hora que su Padre le había impuesto para dar  a los hombres la Buena Nueva..
Comiencen, los sacerdotes y obispos a da la Buena Nueva, muestren a Dios que quieren ganar el Cielo, porque el día en que el Padre los llame de nuevo a su seno, si no se han arrepentido, si no han llorado copiosas lágrimas y pedido perdón ¡será terrible!, aún cuando la misericordia los salve. Este es mi mensaje de esta noche en el próximo que será el último os diré que Mensajes, a quienes y de que forma debéis darlo a conocer, porque por ahora esto deben saberlo solamente los obispos y por consecuencia lo sabrán los sacerdotes.
María vuelve a pedirles con toda humildad, que escuchen sus palabras, que se arrepientan, son mis hijos y no quiero que ninguno se pierda. Está dicho cada uno sabe en su corazón lo que no ha hecho por el Reino de los Cielos.
A vosotros, no dejéis de rezar el Santo Rosario y de invocar como lo hacéis a la Santísima Trinidad. Un ángel les dirá el hábito que un día habrán de usar con tranquilidad de espíritu, y les pido esto, estad tranquilos porque para hacer esto que vuestra Madre os pide debéis estar serenos, tranquilos y rezando el Santo Rosario, pidiendo luces al Altísimo.
Os dejo hasta el próximo encuentro con la bendición de la Santísima Trinidad que es Dios Padre, Dios Hijo, Dios Espíritu Santo, Hasta pronto.-" 21.11 hs. 

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